TARTA de MOUSSE de MELOCOTÓN fría
Ingredientes:
- 1 lata de melocotones en almibar (850 gr)
- 10 hojas de gelatina
- 300 gr. queso de untar
- 500 gr. nata para montar
- 100 gr. azúcar
- 600 gr. mermelada de melocotón
- 18-20 sobaos, bizcochos...
Almíbar para emborrachar los sobaos:
- Agua, azúcar y ron
Preparación:
Hacemos un almíbar flojo. Ponemos un poco de agua y azúcar en un cazo a hervir durante unos minutos. La cantidad es según os guste de borracho. Pasados unos minutos añadimos 30 gr. de ron o cualquier licor que os guste. Lo dejamos hervir unos minutos para evaporar el alcohol, de esta manera pueden tomarla los niños. Reservamos.
Ponemos papel de hornear en el fondo de un molde desmontable. Colocamos los sobaos en el molde de forma que el fondo del molde quede totalmente cubierto. Reservamos.
Ponemos 7 hojas de gelatina a hidratar en agua fría, unos 8-10 minutos. Calentamos un poco de almíbar. Escurrimos la gelatina y la introducimos en el almíbar templado. Revolvemos para disolverla totalmente. Trituramos todos los melocotones menos un medio, que reservamos para la decoración, con el almíbar restante. El paso siguiente no es necesario, sólo si queremos una mousse más fina. Pasamos la mezcla por un colador con ayuda de un cazo, para restregar.
El queso de untar que tendremos a temperatura ambiente, lo integramos en el triturado de melocotón. Montamos la nata con el azúcar. Y la añadimos a la mezcla anterior. Con el almíbar que hicimos con el ron, bañamos los sobaos. Encima vertemos la mezcla totalmente integrada de melocotón, almíbar, queso de untar y nata montada con el azúcar. Ponemos la mousse en el congelador unas horas, como mínimo 3-4 horas.
Ponemos 3 hojas de gelatina a hidratar, igual que antes. En un cazo hervimos el agua con la mermelada unos minutos. Le pasamos la batidora. Disolvemos la gelatina en la mermelada y esperamos a que enfríe, pero no demasiado, porque entonces no se extendería de forma uniforme. Extendemos la mermelada sobre la mousse congelada en el molde. Volvemos a congelar. Yo la dejé toda la noche en el congelador y al día siguiente antes de comer... la sacamos del congelador y dejamos a temperatura ambiente un rato, para desmoldarla. Decoramos con 1/2 melocotón que dejamos sin triturar, una fresa en almíbar y unas virutas de chocolate. Estuvo en la nevera mientras comimos. La serví como tarta helada y ...ENCANTÓ!!!. Pero si realmente queréis saborearla y que no esté tan fría, tenéis que tenerla en el congelador sólo para hacerla y después tenerla en la nevera. Por ejemplo, en mi caso la sacaría del congelador por la mañana y la pasaría a la nevera, de esta manera estará fría, pero no, semi congelada.
Como podéis ver es de lo más lucida y está ... unnmmhhh!!!. Animaros y contarme!!!